a) Falta de preparación del Director o Dueño.
b) Inician con una idea de negocio, pero sin un plan bien definido y robusto.
c) Carecen de controles (producción, gastos, ventas, etc.).
d) Falta de planeación estratégica e indicadores específicos para el Empresario y sus colaboradores.
e) El Fundador normalmente no tiene el conocimiento, experiencia y liderazgo que necesita la empresa; y todas las decisiones y eventos que pasan por sus manos, hasta que se convierte en un cuello de botella de su misma empresa.
f) Otra razón de la fragilidad tendría que ver con este Director que normalmente está aislado de la comunidad empresarial. Al principio sus prioridades son vender, cobrar, sobrevivir y difícilmente busca integrarse a una comunidad formada por otros empresarios.
Fuente: IPADE, Abril 2021